Estamos en el mes de noviembre, algunos disfrutamos y celebramos la Feria, otros, el día de Acción de Gracias. Lo cierto es que sentimos que ya estamos en Navidad, una época llena de regalos, sorpresas, felicidad y mucha mucha comida. Cuando esta época llega solo queremos disfrutar y muchos se olvidan de todo, piensan: “No importa, en enero resuelvo”, “comenzaré el 2017 poniéndome en forma”, etc., etc. Cuelgan la toalla y dejan de ir al gimnasio, ¿comer saludable?, ¿qué es eso?, ¡estamos en Navidad, hay que disfrutar! Llega el 24 de diciembre y quizá la ropa que compraste para ese día te queda ajustada y tienes en mente: “ya el 2 comienzo de nuevo y me pongo las pilas”. ¿Te sientes identificada? Ciertamente es difícil rebajar en Diciembre, pero la idea es mantenerte, sin engordar todos esos kilos que al llegar enero vas a querer rebajar en una semana y será imposible. Un solo plato navideño puede incluso sobrepasar las 1.500 calorías y no solo eso, sino que la calidad de los alimentos influye en la respuesta hormonal, y vamos a estar claros, las comidas navideñas están cargadas de azúcar refinada…No vamos a encontrar la calidad aquí por mucho sabor que tengan. Así que les daré mis tips para no tirar todo su esfuerzo por la borda y así puedan disfrutar sin remordimientos posteriores:
-Olvida el comportamiento de “todo o nada”: disfrutar de los alimentos navideños no implica dejar de comer saludable. Esto es un error. El poder lo tienes tú. La Navidad y año nuevo implican 4 días (24, 25, 31de diciembre y 1 de enero), esos son los días de comelona, el resto de los días no tienes que comer hallacas a diario, ni pan de jamón a diario o pernil; estas costumbres no son las ideales y son las que conducen a que en esta época veamos en la emergencia hospitalaria a muchas personas con cetoacidosis diabética o con dolor precordial, ya sea por angina de pecho o infarto al miocardio, ¿por qué?, porque esas son las consecuencias al comer desenfrenadamente tantas grasas trans, carbohidratos refinados o azúcar. Los días entre estas celebraciones sigue tu alimentación saludable como de costumbre.
-Toma abundante agua: eso te ayudará a tener un metabolismo eficiente y a eliminar las toxinas durante estos días.
-Ejercítate: esto permitirá crear un balance de calorías y mantener un ambiente hormonal ideal en tu organismo. Ejercítate 5 días a la semana.
-Prepárate durante el día: Los días de celebración prepárate enfocándote en la calidad de los alimentos. Come muchos vegetales y frutas, cargados de fibra, agua y nutrientes. Evita las carnes rojas para que no enlentezcas la digestión y así en la noche puedas digerir mejor los alimentos. Come cada 3 horas para mantener tus niveles de energía y evitar caídas de azúcar en sangre que conducen a más antojos.
-Modérate: Al servirte tu plato navideño, trata de buscar el balance. Si te gusta más la ensalada entonces come la mitad de la hallaca y deja para otro día el pan de jamón, o cómete la hallaca y el pan de jamón y deja la ensalada. ¿Y el postre?, pues, ¡sírvete la mitad!
-Come conscientemente: disfruta los olores y sabores de tu comida, mastícala muchas veces para poder digerirla eficientemente. Presta atención a cada bocado, esto activará todos los neurotransmisores cerebrales y a las hormonas que indican que estás satisfecho.
-Evita las bebidas hipercalóricas: un vaso de ponche crema tiene aprox. 400 calorías , mejor evitar el ponche, la piña colada y optar por champagne, vino tinto, vodka, tequila, entre otros, que son bajos en calorías o hacer un ponche crema saludable, como esta receta de mi amiga Sascha Fitness.
-Desintoxícate: Al día siguiente vuelve a comer frutas, vegetales, proteínas preferiblemente de pescados, mariscos o granos enteros, y no olvides tomar mucha agua para estabilizarte. Espero que todos estos tips sean útiles para ti como los han sido para mí, y que disfrutes la Navidad sin remordimientos. Si al final engordas un poquito, no te estreses, será más fácil encarrilarse igualmente tomando algunas de estas medidas.