La leche es un líquido blanco proveniente de los mamíferos, que se utiliza como alimento para las crías hasta que tienen la capacidad de digerir otros alimentos. De igual forma, los humanos comenzamos a consumir la leche en nuestra primera etapa de vida ya que es una buena fuente de nutrientes que favorece nuestro crecimiento.
Los animales por instinto determinan hasta cuándo ingerir la leche, ahora bien, ¿por qué los humanos NO son capaces de dejar de consumirla? Realmente, creo que son malas costumbres impuestas por la sociedad. Sin embargo, más de una vez he escuchado a más de uno decir: “¿cómo voy a dejar los lácteos si ellos aportan calcio y beneficios al organismo?” Eso es totalmente FALSO. La leche proveniente de los animales contiene principalmente lactosa, un azúcar simple que eleva la insulina.
Aún cuando la leche es alta el calcio, la calidad de su absorción es pobre. Hay fuentes vegetales de calcio de mejor calidad: Las semillas de chía tienen gramo por gramo más calcio que la leche, las sardinas, el brócoli, los frutos secos, algas, col rizada, linaza y suplementos de citrato de calcio.
No queremos satanizar un alimento, una taza de leche descremada al día no es que te va a engordar, pero cuando buscas mayor definición para perder grasa suele estancarte, al mismo tiempo, es difícil encontrar un adulto que tolere y digiera bien los lácteos. Generalmente la enzima que se encarga de su digestión se va tornando ineficiente, porque en teoría la leche es únicamente para los niños. El único mamífero que consume leche en la edad adulta y de otra especie es el hombre.
A veces retienes líquido, te dan gases, inflamas y no sabes por qué, y realmente es por una sensibilidad a un alimento como la lactosa o en algunos casos el gluten, proteína presente en algunos cereales como el trigo y la cebada.
Para que entiendas mejor la diferencia entre ambas, una taza de leche de vaca descremada tiene 90 calorías y 12 gr de azúcar (lo que hace que se eleve la insulina = QUEMAS MENOS grasa).
Es por eso que recomiendo la leche vegetal, de los frutos secos. A diferencia de la leche animal, una taza de leche de almendras, avellanas o nueces tiene 30-40 calorías y ¡NO tiene azúcar! Es perfecta si quieres perder grasa o si buscas definirte, marcar abdomen, etc. Puedes incluso tomarla en la noche, ¡Es riquísima!
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