La piel es el órgano más grande de nuestro cuerpo, y una de sus características es que es elástica. Cuando ganamos unos kilitos o perdemos grasas la piel se va estirando y encogiendo. Este proceso nos pasa factura y es lo que conocemos como flacidez.
La alimentación, la edad, el ejercicio y la genética son algunas de las cosas que influyen para ganar flacidez. Mi recomendación es que si buscas perder grasa lo hagas poco a poco, no con una dieta hipocalórica, muy baja en calorías en la que pierdas masa muscular, porque esta es como un soporte.
Cuando pierdes peso se pierde grasa, masa muscular y un porcentaje de agua. Cuando haces una dieta muy restrictiva generalmente se pierde más masa muscular que grasa, entonces la flacidez se vuelve mucho mayor.
Cuida tu alimentación para cuidar la elasticidad de la piel. Lo que comes tiene un impacto directo en tu cuerpo, absolutamente todo tiene una respuesta hormonal y química en ti. Una buena dieta ayuda a generar una respuesta positiva.
Uno de tus grandes enemigos es el azúcar, porque interfiere en la síntesis de colágeno, envejece la piel e incrementa la grasa corporal como ningún otro alimento. Trata de consumirla en la menor cantidad posible, solo en momentos específicos.
Consume más vitamina C, que es la precursora del colágeno, ayuda a producirlo en mayor cantidad. Esta se obtiene de muchos alimentos, sobre todo del pimentón y los cítricos: la naranja, la mandarina y la toronja son algunas de las frutas que la contienen. Sin embargo, el suplemento siempre será más efectivo porque tiene una dosis alta.
Trata de minimizar los alimentos procesados, aquellos que vienen en un empaque y tengan más de 5 ingredientes. Todos los que contengan mucha azúcar y poca fibra son los principales saboteadores.
Los vegetales verdes, frutas cítricas y la proteína van a ser tus aliadas para mejorar la apariencia de la piel. Por supuesto el agua, el estar hidratado influye muy positivamente, mejora su color y su aspecto en general. Además de ayudar a mantener tu metabolismo activo, controlar el apetito, ayuda a la pérdida de grasa.
Entrena con pesas. Como los músculos son tu soporte, al fortalecerlos ayudarán a que tengas menos flacidez. Haz cardio tres veces a la semana entre 30-35 minutos. Pero las protagonistas serán las pesas para mantener todo en su sitio.
Después del embarazo siempre queda algo de flacidez, también depende de la genética y de cómo te cuidaste en ese período. No existe un método milagroso, es algo que se corrige poco a poco, hay que tener paciencia.