Los estiramientos dinámicos son movimientos de velocidad, similares a correr o a un calentamiento de cardio, que al hacerlos logran que tu músculo se vaya estirando poco a poco sin la tensión que generan los estiramientos estáticos. Estos son perfectos para antes del entrenamiento sin que sustituyan el calentamiento.
Una buena rutina de estiramientos dinámicos podría incluir correr con las rodillas al pecho, correr con los pies yendo a los glúteos, dar un paso y llevar la mano contraria al pie, lunges, entre otros. Lo importante es que sea una rutina variada y completa para que los músculos estén acondicionados para empezar a entrenar. Lo recomendable sería que semana a semana se variaran los ejercicios o su cantidad.
Entre todos los beneficios que este tipo de estiramientos provee están:
- Aumentar la potencia de los músculos.
- Brindar agilidad y equilibrio
- Estirar tus músculos fríos
- Dejar tu cuerpo listo para el entrenamiento
El truco está en comenzar de forma lenta e ir aumentando mientras se van estirando los músculos. No olvides que el movimiento debe ser controlado o estarías arriesgándote a tener una lesión; debe hacerse después de un calentamiento aeróbico de al menos 5 minutos y la rutina debería durar al menos unos 6 minutos (y un máximo de 12 minutos).
Estirarse demasiado o saltar al final del movimiento son cosas que muchos hacen, ¡evítalo! Estos podrían ser perjudiciales para tus músculos, ya que podrían quedar débiles para el entrenamiento posterior.
Es importante también evitar que pasen más de 5 minutos entre el estiramiento y el entrenamiento pues habrás perdido el trabajo.
No olvides que una mala rutina podría ser la causante de que no logres tus objetivos. Por eso, siempre es bueno chequear los entrenamientos y todos los tips que hay en el libro “Los secretos de @SaschaFitness”.