El agua, tu principal aliado contra la retención

La retención de líquidos, conocida también como “edema”, puede ser causada por insuficiencias cardiacas, problemas circulatorios, enfermedades renales o hepáticas, y es capaz de causar hinchazón en el cuerpo y aumento de peso.

La obesidad está estrechamente vinculada con este edema, debido a la mala alimentación. Uno de los responsables de la retención de líquido en el cuerpo son los alimentos altamente procesados que, por lo general, están llenos de aditivos, conservantes y son altos en calorías. Es fundamental tocar el sodio en cuando a este tema, porque cada gramo retiene 5g de agua, así como los carbohidratos. Una dieta alta en azúcar y harina refinada eleva la insulina, retiene líquido y por supuesto, dificulta la pérdida de grasa. El potasio, por otra parte, es un mineral que ayuda a balancear los líquidos y minerales en el cuerpo, ayudando a mantener la presión sanguínea a un nivel normal. Es excelente para contrarrestar los efectos del sodio al día, es necesario de 2 a 4 gramos.

Alimentos altos en potasio:

Un cambur mediano (tiene alrededor de 425 gramos de potasio)
Ciruelas pasas (1/4 de taza tiene 370g )
Lechosa
Mango
Kiwi
Naranja
Tomate
Aguacate
Batata
Champiñones

Al minimizar los alimentos procesados en la alimentación, como los enlatados o embutidos que son altos en sodio, y los refrescos que son altos en azúcares, verás un cambio drástico en tu cuerpo que no solo será beneficioso para tu físico, sino también para tu organismo. El abuso del ejercicio es otro factor que te puede hacer retener líquidos. Entrenar toda la semana más de dos horas, puede aumentar los niveles de estrógeno, bajar la progesterona, la testosterona y puede darse una sobreproducción de hormonas adrenales.

Cuando sientas que estás “sobreentrenando”, debes descansar una semana.

Otro aliado indiscutible contra la retención es el agua. Estar lo suficientemente hidratado ayuda a eliminar toxinas en tu cuerpo y a perder grasa. También es importante señalar que las bebidas como el café o el té no hidratan sino que deshidratan, porque contienen cafeína. Por cada taza de estas se debe beber un vaso de agua. Cuando el cuerpo no tiene la correcta hidratación, se reserva lo que tiene como método de defensa. No se trata de satanizar la sal, ya que es necesaria para tener un balance de electrolitos, pero puede controlarse de manera natural con algunos alimentos como pollo, huevos, algunos vegetales y usando sal marina en las comidas en vez de la corriente. Todo lo que comemos genera un impacto en el cuerpo, por eso hay que poner sumo cuidado a la alimentación y al ejercicio que a veces pasan desapercibido, causando daños mayores a futuro.