Si quieres llevar un estilo de vida saludable, la clave es la organización. Sí, señor, ¡organización! Si tienes poco tiempo para cocinar, llevas una vida ajetreada, te da fastidio o estás muy cansado para preparar algo saludable, la mejor herramienta que puedes aplicar tiene que ver con la organización o “meal prep” como le llaman algunos.
Para maximizar tu tiempo puedes dedicar dos o tres días a la semana para cocinar “en bulto” comida que no se vaya a dañar, así podrás tener siempre a la mano cosas saludables y evitarás caer en provocaciones o improvisaciones. Además, esas cositas pueden servirte también como base para otras preparaciones, por ejemplo, puedes hacer un guiso con tomates, cebolla, pimentón y ajo, todo picado en trozos pequeñitos, lo cocinas en un sartén, aderezando con especias, y luego añades vainitas picadas ya cocidas. También, puedes preparar una salsa de tomate natural con esos ingredientes y colocarla encima de una pechuga de pollo que tengas en la nevera ya cocida. Aquí es donde entran en juego la practicidad y la creatividad.
Otra de las cosas que puedes hacer es tener vegetales ya lavados y picados, guardados en envases dentro de la nevera: lechuga, tomate, pepino, champiñones,…, y así puedes preparar una buena ensalada en un 2 x 3, añades unas tiritas de pechuga de pollo ya cocida, preparas una buena vinagreta, ¡y listo!
El arroz, la quínoa, batatas, etc., los puedes tener ya cocidos y guardados en la nevera; cuando tengas hambre solo los calientas y ya está. Eso te ayuda a maximizar el tiempo y a resolver cuando no te da chance de cocinar durante la semana. ¡Ojo!, con esto no estoy diciendo que siempre tienes que comer recalentado, se trata de tener cosas a la mano para ciertos momentos en los que el tiempo simplemente no rinde; y es que si llegas cansado a tu casa lo que menos quieres es tener que lavar la lechuga, lavar y picar los tomates, marinar el pollo, etc., ¿es o no es?
Entonces, en estos casos la organización es clave, porque precisamente por esa flojera o “falta de tiempo” es que caemos en la tentación y recurrimos a productos empaquetados, procesados o a la comida rápida. Si te organizas bien dos días a la semana puedes anticiparte a estas situaciones y ahorrarte muchísimo trabajo. Recuerda que la planificación y la organización son tus mejores aliadas para alcanzar cualquiera de tus metas.