Existen infinidad de combinaciones poderosas para sumar a tus hábitos saludables, pero si eres intolerante, sensible a ciertos alimentos, o sencillamente quieres seguir una dieta libre de gluten porque sientes que con una alimentación hipoalergénica tienes más energía y menos problemas gastrointestinales, ¡hazlo, conéctate con lo que dice tu cuerpo!
No te dejes llevar por las personas que dicen que comer sano es aburrido. Probablemente no lo han intentado del todo bien o han escogido malas opciones. Tú atiende lo que dice tu cuerpo. Con imaginación y creatividad puedes darle la vuelta a muchos platos, de modo que puedas balancear tus porciones y evitar esos ataques de ansiedad. Prueba, en nuestra sección de recetas tienes muchas opciones.
Es normal tener hambre cuando has pasado tiempo sin comer y estás haciendo mucho ejercicio, o cuando llevas una dieta de pérdida de grasa debido a que consumes menos calorías.
Aprende a identificar hambre (cualquier cosa que te provoca) de apetito (comer carbohidratos, dulces o grasa) y dale a tu organismo lo que necesita, para que a partir de allí hagas tu plan de alimentación, que contenga alimentos que provean más saciedad durante las primeras comidas del día. Las frutas y los vegetales fibrosos son opciones densas en micronutrientes y mantienen los niveles de energía estables.
Date cuenta de que cuando haces lo mejor para ti, le das a tu cuerpo los nutrientes que necesita para estar saludable, tener más energía y rendir más. Porque cuando te cuidas no solo porque te vas a ver mejor sino porque es lo mejor para ti como persona, tu seguridad va incrementando, tu actitud va a mejorar, te sentirás más fuerte y feliz, y eso hará que la relación que tienes contigo mismo y tu cuerpo sea diferente, mejor, más noble y objetiva. ¡Anda, hazlo, conéctate con lo que dice tu cuerpo!