Algunas personas tienen la idea de que empezar un estilo de vida saludable es restringir algún grupo de los tres macronutrientes, pasar hambre extrema, entre otros mitos que existen...
- Dejar de comer o saltarse las comidas: se tiene la mala percepción de que si se come menos, 2 o 3 comidas al día, rebajas más rápido; y esto puede generar un efecto rebote, debido a que cuando nos saltamos alguna, el cuerpo entra en un estado de emergencia y empieza a quemar menos calorías. Por eso es que en vez de hacer 2 a 3 comidas, es mejor hacer de 5 a 6 comidas, controlando porciones, al día.
- Abusar de algo bueno: nada en exceso es bueno, las porciones deben ser de acuerdo a las necesidades y objetivos de cada persona.
- Excederse en el cardio: hacer más de 45 minutos de cardio o 25 minutos de HIIT, te puede llegar a desgastar el músculo, ya que en ese momento se empieza a consumir los aminoácidos del tejido muscular.
- No escuchar a tu cuerpo: debes descansar, si un día tu cuerpo no da más para entrenar o realizar alguna actividad física, no lo fuerces. Se puede dejar de entrenar por 1 o 2 días a la semana, y si estás enfermo puedes parar hasta 5 días, primero se tendrá que ir el malestar para volver a entrenar de nuevo.
- Seguir dietas genéricas: si buscas comenzar un estilo de vida saludable, cambiar tus hábitos y empezar un estilo de vida diferente, la mejor manera de hacerlo es con un especialista, ya que este va a conocer tu tipo de cuerpo, tus objetivos y metas principales. Seguir dietas genéricas puede producir un mal impacto en el cuerpo, ya que no se toman en cuenta las variantes que tiene cada persona, además de ser difíciles de mantener en el tiempo.
Empezar un estilo de vida a veces puede ser un poco difícil, pero con constancia y dedicación puedes llegar muy lejos y cumplir con todos los objetivos planteados desde el principio.